HOZANA : Entrega un hermoso regalo de San Valentín este año

Generalmente, para celebrar el día de San Valentín, se acostumbra a hacer un regalo a su esposo, esposa, enamorado o enamorada… ¿Y qué tal si este año nos tomamos el tiempo de dar un regalo personalizado y precioso a nuestro ser querido? Por ejemplo, una buena idea es hacer una novena de oración por la persona que amamos, de este modo, durante 9 días, cada mañana o cada noche, podemos confiar al Señor esa persona especial de la cual estamos enamorados.

“¡Qué hermosos son tus amores, hermana mía, novia mía! Tus amores son más deliciosos que el vino, y el aroma de tus perfumes, mejor que todos los ungüentos” (Cantar de los Cantares 4:10).

A continuación, te presentamos algunos ejemplos de gracias que podemos pedir al Señor para nuestra pareja:

  • Desarrollar una mejor capacidad de escucha en la pareja: generalmente, cuando nos conocemos bien desde hace mucho tiempo, tenemos la impresión de que sabemos todo sobre nuestra pareja, o que quizá nos entendemos sin siquiera mencionar una palabra. Sin embargo, es necesario tener presente que nuestro compañero de vida es otra persona completamente diferente, es decir, un vasto continente por descubrir, redescubrir y explorar. Saber mantener el corazón abierto a las complejidades y ambivalencias de la pareja también supone aceptar dejarse seducir nuevamente…
  • Ver a su Valentín con los ojos de Dios: es necesario volver a tener los ojos enamorados que se tenían aquel primer día de encuentro, es decir, unos ojos que solo ven la belleza del otro, pues Dios mismo nos ve con una tierna mirada de amor.
  • Confiar a Dios el camino y la realización de tu pareja: como pareja, tenemos nuestros propios proyectos en conjunto, los cuales nos permiten avanzar y compartir cosas bonitas. Sin embargo, es bueno recordar que Dios también tiene un plan de amor, único para cada uno de nosotros. Podemos pedir al Señor que nos ayude a respetar, a no temer, y a dar ánimo a la otra persona, de modo que pueda vivir el propósito para el cual fue llamado.
  • Comprender cómo esa persona es un verdadero regalo para mí: ver al otro como un don de Dios significa saber que esa persona forma parte del plan de Dios para nuestras vidas, y aunque a veces no es sencillo, el Espíritu Santo puede ayudarnos a discernir aquello que el Señor quiere cambiar en nuestras vidas, a través de un comportamiento, palabra o silencio. En este orden de ideas, valdría la pena preguntarse: ¿qué nos está invitando el Señor a cambiar, a seguir haciendo, a compartir, a desarrollar en nosotros a través de nuestro ser amado?...

“¡Bendita sea tu fuente, y encuentra tu alegría en la mujer de tu juventud, cierva amable, graciosa gacela! Que en todo tiempo te embriaguen sus amores y estés siempre prendado de su afecto” (Proverbios 5:18-19).

 

Escrito por: Alice Ollivier de Hozana.org

-Traducido y adaptado del francés por Sharael Sánchez